Tu nivel de felicidad en el trabajo aumenta cuando respiras el buen ambiente que se vive en la oficina. Es decir, tu motivación crece cuando descubres que trabajar y disfrutar no son dos conceptos incompatibles, sino dos ingredientes que se retroalimentan de un modo necesario.
Y es que una organización eficiente no solo tiene que priorizar el beneficio económico, sino que también debe crear unas condiciones de salud para fomentar el bienestar físico y emocional de los trabajadores. Es decir, para desarrollar el talento es fundamental que las personas se sientan cuidadas y valoradas en su puesto de trabajo.
La motivación eleva el salario emocional
El salario emocional es esa parte de retribución al margen de lo económico, con el fin de mejorar la calidad de vida del trabajador, dando solución a sus necesidades personales y familiares y fomentando la conciliación entre casa y trabajo.
Sin embargo, aunque se hable de la empresa, son cada una de las personas y sus actitudes las que constituyen un clima laboral agradable. Por eso, sea cual sea tu puesto de trabajo, es muy importante que no te posiciones en el equipo como un agente pasivo, puesto que tú tienes un rol activo en el seno de tu organización. Desarrolla, por ejemplo tu sentido del humor, y fomenta la colaboración en la búsqueda de objetivos comunes. En definitiva, más allá de todo individualismo, persigue siempre el bien común. Tu felicidad beneficia a la propia empresa ya que tú eres un embajador de marca de la organización para la que trabajas.
Tu ilusión transmite valores de excelencia ante los clientes, que valoran muy positivamente ser atendidos con amabilidad. Y más, si nos referimos a establecimientos sanitarios.
¿Sabes que la calidad del tiempo que vives en tu trabajo influye en las vivencias de tu vida privada?
Si desarrollas tu jornada en un ambiente saludable, podrás reducir los niveles de estrés y ansiedad. Además, un ambiente agradable también incrementa tu talento como emprendedor porque los bloqueos y las tensiones que surgen de los malos rollos en la oficina son un freno a la concentración y el desempeño profesional.
Nosotros, en Cofarte, cada día intentamos llevar una sonrisa amable a nuestros socios y colaboradores y disfrutamos del #EfectoCofarte
¿Ustedes?