Síndrome de Asperger


Según la Confederación Asperger España, se trata de un trastorno del desarrollo que implica una alteración en el procesamiento de la información. Las personas que lo padecen tienen un aspecto e inteligencia normal. Suele manifestarse de diferentes formas en cada individuo, pero todos tienen en común los siguientes aspectos:

  • Dificultades para la interacción social, especialmente con personas de su misma edad.
  • Alteraciones de los patrones de comunicación no-verbal.
  • Dificultades para la abstracción de conceptos
  • Dificultades en la interpretación de los sentimientos y emociones.

El síndrome de Asperger supone grandes dificultades para entender el mundo de lo social, en la coordinación motora, en el ritmo de conversación y alteración de la entonación, volumen, timbre de voz, etc. Se encuentra encuadrado en los Trastornos del Espectro Autista, aunque se mantiene diferenciado del autismo clásico.

Déficits en los siguientes aspectos del desarrollo:

  • Conexiones y habilidades sociales.
  • Uso del lenguaje con fines comunicativos.
  • En la mayoría de los casos torpeza motora.

Los niños/as pueden ser:

  • Socialmente torpe y difícil de manejar en su relación con otros niños y/o adultos.
  • Ingenuo y crédulo.
  • A menudo, sin conciencia de los sentimientos e intenciones de otros.
  • Con grandes dificultades para llevar y mantener el ritmo normal de una conversación.
  • Se altera fácilmente por cambios en rutinas y transiciones.
  • Literal en lenguaje y comprensión.
  • Muy sensible a sonidos fuertes, colores, luces, olores o sabores.
  • Fijación en un tema u objeto del que pueden llegar a ser auténticos expertos.
  • Físicamente torpe en deportes.
  • Incapacidad para hacer o mantener amigos de su misma edad.

Pueden presentar:

  • Memoria inusual para detalles.
  • Problemas de sueño o de alimentación.
  • Problemas para comprender cosas que han oído o leído.
  • Tendencia a balancearse, movimientos repetitivos o caminar mientras se concentran.

En los adultos coinciden algunas de estas características. Tiene problemas para relacionarse con los demás a un mismo nivel de desarrollo.

Es un trastorno muy frecuente, entre 3 y 5 por cada 1000 nacidos vivos se ven afectados.  Tiene mayor incidencia aparente en niños que niñas, aunque es muy probable que exista un infradiagnóstico del mismo en las mujeres debido a que su presentación clínica es diferente. Es un síndrome poco conocido entre la población general.