“Por la mañana, lo sospecho, dormiremos todo lo que hemos velado en esta noche” frase de la obra de William Shakespeare El sueño de una noche de verano.
No queremos que eso nos ocurra y tener que pasar por esas noches tan incómodas, donde nuestra salud acaba sintiendo las consecuencias. Es posible poner remedio para poder descansar plácidamente en esta época estival.
El verano es una época donde las rutinas del sueño sufren cambios constantes, reflejándose después en el día a día. El cambio de actividades, las altas temperaturas, contar con más horas de luz…; son factores que afectan a nuestro ritmo circadiano, por lo que debemos tenerlos en cuenta para que no nos perjudiquen.
Los ritmos circadianos es el nombre que se le da al “reloj interno del cuerpo” que regula el ciclo de 24 horas.
Consecuencias de no dormir bien
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| Consecuencias no dormir bien |
- Si dormimos poco o mal un día, acarrea consecuencias al siguiente. Pocas patologías muestran unos efectos tan claros.
- El sueño perdido no se recupera, se acumula generando consecuencias a largo y medio plazo.
- Todos tenemos un patrón propio a la hora de dormir: necesitar más o menos horas para sentirnos descansados, si nos afectan los estímulos externos en el descanso o no…
- En las noches quemamos grasas, no poder hacerlo nos afectaría físicamente y en nuestra salud.
- Problemas de conducta y crecimiento, sobretodo en edades tempranas afectando al rendimiento escolar.
¿Cómo dormir bien en las noches de verano?
Durante el verano solemos alterar nuestra rutina diaria y si esto ocurre con hábitos poco saludables puede producir efectos en el cuerpo como el dolor de cabeza o la migraña.
Si normalmente durante el año no cuentas con problemas a la hora de conciliar el sueño, siendo el verano la época donde las noches se te hacen más largas, estas recomendaciones te ayudarán:
- Hidratación durante el día, es importante estar hidratados prevenirá los posibles dolores de cabeza o de cuerpo por las noches. Aumentar la ingesta de agua, limitando las sustancias que puedan actuar como diuréticas, tales como la cafeína.
- Sábanas apropiadas, el roce de nuestro cuerpo con las sábanas va generando calor, una ropa de cama de material ligero, no absorbente y con componentes de algodón ayudará a mantenernos más frescos. La posición del cuerpo más adecuada para dormir sería la de lado, siendo la que menos contacto tiene con las sábanas, evitando que éstas terminen calentándose.
- Descubrir tus pies, mantener los pies frescos durante la noche nos proporcionará alivio, equilibrando nuestra temperatura corporal.
- Ventilación antes de acostarte, si no es posible una ventilación natural podemos ayudarnos de un ventilador para movilizar el aire de la habitación, aunque siga siendo caliente si se moviliza una hora antes de dormir nos sentiremos más cómodos.
- Duchas refrescantes, una ducha antes de dormir nos será muy útil para poder conciliar el sueño. Nos sentiremos más frescos, eliminando la sensación sudorosa y pegajosa antes de dormir, es posible que el sueño dure más tiempo.
- Mantener la rutina, la rutina adquiere mayor importancia en esta época. Si no tenemos que madrugar, intentar despertarnos temprano y a la misma hora ayudará a mantener nuestro ritmo circadiano a punto.
- Mantenimiento de la habitación o el hogar, mantener las persianas semibajadas y las ventanas semicerradas durante las horas más calurosas del sía, evitando la acumulación de calor en la habitación y/o el hogar. Utilizar colores oscuros en la habitación absorberá el calor haciendo la estancia más incómoda en el verano.