La sanidad ambiental se ocupa de todos los aspectos del entorno de nuestras vidas. Implica la evaluación, corrección y prevención del impacto de los elementos estresantes que afectan a nuestra salud. Estos elementos pueden ser biológicos, químicos, físicos, sociales, psico-sociales o cualquier combinación de todos estos.
La contribución de la sanidad ambiental a la salud pública incluye entre otras muchas cosas:
- La regeneración urbana y la mejora en las condiciones de la vivienda.
- La calidad y disponibilidad de alimentos seguros y nutritivos y el apoyo para su producción local.
- La prevención de accidentes y lesiones en el hogar y el trabajo.
- La seguridad e higiene en el trabajo.
- La protección de la salud y el control de enfermedades transmisibles.
- El control de infestaciones de plagas molestas y de la salud pública.
- El control del ruido.
- El control de la polución.
- La remediación de suelos contaminados.
- La mejora de la calidad del aire.
La salud ambiental se preocupa por la salud y el bienestar de las personas, las comunidades en las que viven y trabajan y las organizaciones con las que trabajan.
El Reglamento Europeo 528/2012 relativo a la Comercialización y uso de biocidas los define en su artículo 3 como ” toda sustancia o mezcla, en la forma en que se suministra al usuario, que esté compuesto por, o genere, una o más sustancias activas, con la finalidad de destruir, contrarrestar o neutralizar cualquier organismo nocivo, o de impedir su acción o ejercer sobre él un efecto de control de otro tipo, por cualquier medio que no sea una mera acción física o mecánica”. En otras palabras, una sustancia biocida sería la que destruye o elimina los seres vivos perjudiciales para el ser humano, las denominadas plagas urbanas o domésticas: cucarachas, hormigas, moscas, mosquitos, pulgas, garrapatas, chinches, ácaros del polvo, etc.
¿Por qué en el canal farmacia?
La dispensación y comercialización de este tipo de productos requiere de especialistas formados en un amplio rango de materias y con una vocación firme de promoción de la salud y prevención de enfermedades que, además, velen por el uso responsable. Los farmacéuticos son profesionales que aúnan todos estos requisitos y además tienen experiencia en la dispensación de otros productos químicos tradicionales en la oficina de farmacia, controlando los usos indicados, la dosificación, etc.
Al fin y al cabo, la salud ambiental es también salud para el individuo.